Es alentador ver que el Gobierno de Oaxaca, a través del Instituto Estatal de Educación Pública de Oaxaca (IEEPO), está implementando un Proyecto de Atención Educativa para niñas, niños y adolescentes migrantes en el albergue Hermanos en el Camino en Ciudad Ixtepec. Este proyecto representa un paso significativo hacia la educación inclusiva, la equidad y la justicia social.
Es especialmente loable que se esté brindando educación a niños y adolescentes en situación de movilidad, ya que esto les proporcionará nuevas oportunidades para un futuro mejor. El derecho a la educación es fundamental, y esta iniciativa demuestra un compromiso sólido con ese principio.
También es destacable que se estén construyendo nuevas aulas y proporcionando mobiliario y material didáctico para apoyar la educación de estos jóvenes migrantes. Además, el apoyo brindado en el albergue, que va más allá de la educación e incluye hospedaje, alimentación, atención médica básica y orientación jurídica, es esencial para su bienestar general.
La colaboración entre el gobierno, la sociedad civil y otras partes interesadas en este proyecto es un ejemplo de cómo se pueden abordar los desafíos que enfrentan las personas migrantes de manera integral y humanista. Este tipo de iniciativas contribuye al fortalecimiento de la solidaridad y la inclusión en la sociedad.
Espero que este proyecto piloto sea exitoso y que sirva como modelo para otras regiones y países que enfrentan desafíos similares relacionados con la migración. La educación es una herramienta poderosa para empoderar a las personas y permitirles forjar un futuro mejor, sin importar sus circunstancias migratorias.
Además, espero que este proyecto piloto se replique en las inmediaciones de la Central de Abastos de la Ciudad de Oaxaca, pues también es un punto álgido de migrantes en el Estado de Oaxaca