Como director de una escuela secundaria en Oaxaca, celebro la iniciativa de la SEP y la FMF para fomentar hábitos de vida saludable a través del fútbol en las escuelas, aunque este torneo solo se quedo en el nivel de primarias

Sin embargo, es importante señalar una realidad que vivimos día a día en nuestras comunidades: es más fácil encontrar una cancha de básquetbol que una de fútbol en muchas regiones de Oaxaca. Esto se debe a que el básquetbol tiene una tradición arraigada en nuestro estado, especialmente en zonas rurales e indígenas, donde las canchas de básquetbol son espacios de convivencia y deporte accesibles para la comunidad.

Mientras que el fútbol también es popular, la falta de infraestructura adecuada, como canchas reglamentarias o espacios adaptados, limita su práctica en muchas escuelas. Por ello, aunque la carta de intención entre la SEP y la FMF es un paso positivo, es crucial que se considere la diversidad cultural y deportiva de las regiones. En Oaxaca, por ejemplo, sería ideal que los programas no se limiten solo al fútbol, sino que también integren otras disciplinas como el básquetbol, que ya cuenta con una base sólida y un gran interés entre los jóvenes.

Además, cualquier iniciativa debe ir acompañada de recursos para mejorar la infraestructura deportiva en las escuelas, ya que muchas carecen de instalaciones adecuadas para cualquier deporte. Sin esto, será difícil lograr un impacto real en la promoción de hábitos saludables. En resumen, aplaudo la iniciativa, pero espero que se adapte a las realidades locales y se complemente con acciones concretas para fortalecer el deporte en todas sus expresiones.